¿Cómo es posible que te hayas ido y no vivas tu vida hasta ser un ancianito?. Que te fueras tan pronto, sin disfrutar de tantos momentos que te faltaban por disfrutar y sentir. Tú, tan fuerte y con ganas de vivir. Y te has ido, ya no estás. Pero, luchaste hasta el final, nunca te diste por vencido. Las esperanzas de todos y en poco desaparecieron. Me alegro de haberte conocido, has sido como alguien más de la familia. No olvides que aquí abajo nadie te va a olvidar. Nunca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario